La Bendita Virgen María concede siete gracias a las almas que le rinden honor diariamente, al meditar en sus lágrimas y en sus dolores (sus sufrimientos). Santa Bridget nos legó esta devoción
Estas Son Las Siete Gracias:
- Concederé paz a sus familias.Serán instruidos en los divinos misterios. Les consolaré en sus sufrimientos y les acompañaré en sus trabajos.Les daré todo
- lo que me pidan, siempre que ello no se oponga a la adorable
- voluntad de mi divino Hijo, o a la santificación de sus almas.
- Les defenderé en sus batallas espirituales en contra del enemigo infernal,
- y les protegeré en cada instante de sus vidas.En forma visible,
- les ayudaré en el momento de su muerte pues ellos verán el rostro de su Madre.
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He obtenido (esta gracia) de mi divino Hijo: Aquéllos que propaguen
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la devoción a mis lágrimas y a mis Dolores, serán llevados
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de esta vida terrena directamente a la felicidad eterna, pues
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todos sus pecados serán perdonados y
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mi Hijo y yo seremos su consuelo y gozo eternos.
Los Siete Dolores
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La profecía de Simeón. (San Lucas 2: 34, 35)El viaje a Egipto.
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(San Mateo 2:13,14)El Niño Jesús perdido en el templo.
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(San Lucas 2: 43-45)El encuentro de Jesús y María, en el camino
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a la Crucifixión.La Crucifixión.
El bajar de la Cruz el Cuerpo de Jesús.
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El entierro de Jesús.
(Después de meditar en cada uno de los Dolores, rece un Ave María)
Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo.
Bendita tú eres entre todas las mujeres y bandito es el fruto de
Tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros,
los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
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